Como hablante nativo de español, poseo un dominio innato y profundo del idioma, respaldado por una vida entera de inmersión en la cultura y la lengua hispanohablante. Mi experiencia en español se ha desarrollado de manera orgánica a lo largo de los años, desde mis primeras interacciones en el hogar hasta mi participación activa en la comunidad y mi educación formal. Mi fluidez en español se extiende a todos los aspectos del idioma, incluyendo la gramática, la fonética, el vocabulario y las expresiones idiomáticas. Soy capaz de comunicarme con claridad y precisión en diversos contextos, desde conversaciones cotidianas hasta discusiones académicas o profesionales.